Puede ser un Líder si quiere

¿Así que le gustaría convertirse en un líder? ¿O perfeccionarse como tal? Se puede, ¿sabe? No importa en qué etapa de su periplo como líder se encuentre, aún PUEDE ser un líder si quiere.

PUEDE hacerlo mejor. PUEDE dirigir a más gente. PUEDE elevar a su organización a las más altas cumbres. ¡Sí, PUEDE!

Pero déjeme decirle algo: ¡No lo logrará por osmosis! No confíe el desarrollo de su liderazgo al hada madrina de los líderes. ¡No se convertirá en un Súper Líder por tocar el dobladillo del traje de Jack Welch! ¡Ay, si fuera tan fácil!

¿Qué es lo que se necesita entonces?

Tiempo. Experiencia. Entrenamiento. Un mentor. Disciplina. Y algunas cosas más. Pero empecemos por el principio. Ud. quiere convertirse en un líder. Eso es bueno.
Quiere perfeccionarse como tal. Eso también es bueno. ¿Pero qué es lo más importante?

Entrenamiento para el liderazgo.

Entrenarse para el Liderazgo. ¿En qué consiste? ¿Cómo estar preparado para el liderazgo? Antes de convertirse en el líder que desea ser, debe evaluar los costes.

El liderazgo es duro. Habrá veces en que se dirá a sí mismo. El liderazgo no vale la pena. Esa gente está loca y yo no me merezco esto. Es cierto. No merece algo así. Pero se trata de su elección. Ud. lo eligió porque quiere dirigir a gente. Quiere mejorar sus vidas. Ud. sí ve las altas cumbres que ellos no pueden ver y desea llevarlos hasta allí. Tomará su tiempo. Costará dinero. Minará sus fuerzas y energías. Evalúe el coste, amigo mío. El liderazgo no es para los débiles ni para los tímidos. Sí, cierto que las recompensas son grandes, pero también lo son los sacrificios. Entrene para poder asumir ese coste.

Valore sus puntos fuertes y sus debilidades.

Son demasiados los que precipitándose en su intento por alcanzar el liderazgo, acaban por desaparecer porque no han sabido valorar por sí mismos sus puntos fuertes y sus debilidades. Y los que siguen adelante se dan cuenta de que deberían haber consolidado ciertas áreas de su entrenamiento que ahora están acabando con su liderazgo.

Si consigue reconocer sus puntos fuertes, podrá concentrarse en ellos y utilizarlos para alcanzar sus objetivos. Si es capaz de reconocer sus propias debilidades podrá sortearlas, o contratar personal para subsanarlas, y esto le permitirá convertirse en un líder de mayor éxito. Así que prepárese y sea extremadamente realista sobre sus puntos fuertes y debilidades.

Entrénese para el maratón, no para el esprint.

Muy poca gente –y quiero decir MUY poca– asume a edad temprana las responsabilidades de un líder. Y cuando lo logran, muchos menos aún ven como los eventos se suceden con rapidez durante su liderazgo.

No, habitualmente las cosas van despacio. ¿Por qué creemos entonces que lo harán rápidamente? Porque son ésas las únicas historias que vemos en la TV y leemos en las revistas. “Joven de veinticinco años crea un negocio que alcanza los 20 millones de dólares de ventas en TAN SÓLO DOS AÑOS”, vende mucho más que “Hombre de cuarenta y cinco años trabaja duro durante veinte y consolida un negocio que marca un antes y un después en su comunidad”. Sí. Luego a menos que Ud sea uno de los pocos elegidos, necesitará entrenarse para el maratón, no para el esprint.

Este ajuste mental y temporal es necesario. ¡Prepárese para el largo plazo!

Desarrolle una buena disposición para el estudio.

Tal vez ya lo haya oído decir alguna vez, los líderes son estudiantes. Es cierto. Y más aún, los líderes son aprendices. No conozco a ninguno que haya alcanzado un cierto nivel de liderazgo sin mantenerse en un aprendizaje continuo.

Uno de mis mentores dirige una compañía de todos conocida –de hecho, probablemente hoy mismo haya utilizado Ud. uno de sus productos, no importa en qué parte del mundo se encuentre– que ingresa miles de millones al año ¡y aún encuentra tiempo cada año para acudir a una escuela para líderes! ¡Es de hecho un líder de tremendo éxito y aún sigue estudiando! ¡ÉSA deberá ser su disposición para el estudio! Si quiere ser un líder, prepárese desarrollando este tipo de actitud.

Aprenda a amar a la gente.

En realidad no lideramos empresas o negocios. No, lideramos gente. Alcanzaremos el éxito si sabemos cómo liderar a la gente. De eso se trata, de Personas. Y la mejor forma de convertirse en un líder de personas es amarlas. Algunos serán capaces de intuir nuestro afecto por ellos así como nuestro amor desinteresado. Si no les demostramos que nos preocupamos por ellos, no nos seguirán. El liderazgo es el arte de dirigir a la gente que nos preocupa y a la que deseamos ayudar. En otras palabras, amamos a la gente. Si las personas le disgustan, probablemente no esté preparado para liderarlas.
En su entrenamiento como líder tendrá que incluir el aprender a amar a la gente. Si el resto acompaña, querrán seguirle.
Ud. PUEDE convertirse en un líder. De verdad lo creo. Si ya lo es, sé que puede serlo aún mejor. ¡Analícese despacio y a conciencia, y verá que probablemente existen áreas en las que necesita mejorar con vistas a perfeccionar su liderazgo, para que cuando realmente se lance, no tenga que frenar y volver atrás!

Entrenamiento para líderes – ¡por ahí se empieza!

“El liderazgo es el arte de dirigir a la gente que nos preocupa y a la que deseamos ayudar”.

Artículo escrito por Chris Widener y publicado en Revista Forever Living España